La Reina necesita su Corte


La Corte de Honor de Santa María la Real de la Almudena fue fundada el 25 de marzo de 1912 por S.A.R. la infanta Doña María Teresa de Borbón y Habsburgo. Hermana del rey Don Alfonso XIII y vecina próxima de la Patrona de Madrid, la infanta sentía una enorme devoción por la Virgen de la Almudena.

Su motivación principal surgió al presenciar la imagen de la Virgen solitaria en la cripta recién bendecida de la futura catedral. Con un empeño y amor ardiente, decidió que la Patrona de Madrid necesitaba su propia Corte, similar a una Reina. El propósito original era establecer turnos constantes de vela ante la imagen de la Virgen, asegurando que nunca estuviera sola.

Nuestro espíritu se basa en:

  • Una devoción ardiente por Santa María la Real de la Almudena.
  • La caridad y el servicio a los más necesitados, reflejados en nuestra «Obra de los Olvidados».
  • La hermandad y unión entre nuestras Damas, Caballeros y la colaboración con otras Congregaciones de la Virgen.
  • El sentido de pertenencia a una «Corte» que, con amor, disciplina y lealtad, vela por la Patrona, haciendo realidad nuestro nombre de Corte de Honor de la más alta de las Reinas.

¡Sé parte de esta hermosa historia de amor y servicio a la Virgen!

La Corte de Honor de Santa María la Real de la Almudena es una gran asociación abierta a todas las Damas y Niñas madrileñas (y no madrileñas) que así lo deseen, y también a los Caballeros Protectores. La Corte de Honor pide muy poco, con obligaciones mínimas y voluntarias, permitiendo que cualquiera que lo desee pueda unirse a la Virgen.

Para las Damas: Las obligaciones son mínimas y voluntarias. Se pide rezar un Ave María diario; asistir a la Fiesta Reglamentaria Anual (en mayo) y a la Misa solemne del 9 de noviembre (festividad oficial de nuestra Patrona), sugiriendo vestir, si es posible, el Traje Capitular (traje de calle de vestir negro, mantilla negra y peineta, zapatos y medias negras, y guantes grises); asistir a la Misa Mensual de los días 25 de cada mes; y una cuota anual de cuantía decorosa y voluntaria.

Para los Caballeros Protectores: La figura de los Caballeros Protectores fue prevista desde la fundación por la infanta María Teresa. Su función se basa en una labor callada y humilde, constante y permanente, junto a la Virgen y sus Damas. Aunque sin cargos ni deberes explícitos, su disposición a «proteger» tanto a la Virgen como a las Damas de la Corte de Honor les hace acreedores al honroso nombre de «Caballeros Protectores de Santa María la Real de la Almudena».

Para la Corte Infantil: La Corte Infantil es la «gran promesa» de la Corte de Honor. Fue creada con un grupo de niñas y las niñas que forman parte de esta Corte cesan en su cargo al cumplir los 15 años, pasando seguidamente a formar parte de la Corte de Honor de las Damas. Las propias niñas pueden tener a su cargo la labor de buscar nuevas Damas.